El manager de Motörhead, Todd Singerman y la novia de Lemmy, Cheryl Keuleman, asistieron al evento, así como una larga fila de fans, que llenaron la famosa avenida Sunset Strip.

Singerman dijo a la prensa:

“Yo lo veo al igual que Johnny Cash, The Beatles y más. El era real. No hacia mierdas. El modo en que iba al escenario era la forma en que iba a casa.

La estatua es solo una parte del tributo a Lemmy, en la area del patio del bar llamada ahora “Lemmy’s Lounge”, se encuentran fotos de Motörhead, así como placa con los nombres de las personas que donaron e hicieron posible la escultura.

The Rainbow era la casa de Lemmy.

Lemmy Is God.